Entradas populares

martes, 21 de julio de 2015

pequeñas victorias

No he conseguido dormir.
No quiero hacerlo.
Porque sé que despertaré y no te veré
arremolinando la sonrisa entre las sábanas.
Prefiero morir de cansancio.

Te llevaste mi alma en el último beso
y ahora besas a otra.
Creo que no he sabido digerirlo,
se me ha quedado haciendo un nudo marinero en la garganta,
bastante más bonito que el que me ata a ti.
A lo mejor por eso soy incapaz de comer nada que no sean otros cuerpos.

Llevo meses sin poder llorar
Me repito que no te lo mereces, que no debo darte el gusto,
me lo he repetido tanto que ya no encuentro las lágrimas.
A lo mejor no puedo comer por eso: porque estoy llena de lágrimas.

Asique me he levantado de la cama,
(aunque no duerma, puedo imaginarte y eso me reconforta)
Era de noche
He vomitado
He gritado todo lo que no puedo llorar
Me he fumado un peta mojado en cerveza
y he vuelto a vomitar.

Me enamoré de aquello que me mataba,
pero tú, mataste a quien amabas
y buscaste otra víctima con mi cadáver aún caliente.
Eso es ser una mierda de persona
Y lo grito: ERES LA MAYOR MIERDA QUE CONOZCO.
Y TE QUIERO
VUELVE.

Abro la ventana, a ver si el aire me seca las lágrimas
(joder, entre grito y grito he conseguido llorar)
También para ver si te veo aparecer con un ramo de rosas por mi balcón.
Está claro que también he conseguido alucinar.

Cierro la ventana y abro el armario.
Cojo ese vestido rojo que siempre juré no ponerme.
Y me lo pongo con esos tacones negros de aguja.
Y me seco las lágrimas.
Ahora que he conseguido llorar

voy a intentar comerme algo: el mundo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario